Bibliofilia Médicolegal
Bibliofilia médico legal
Cuad Med Forense. 2013; 19(1-2):53
El libro de Medicina Legal de Richard von Krafft Ebing, profesor de Clínica de las Enfermedades Mentales en la Universidad de Viena, tiene un excepcional valor dentro de la bibliofilia médico legal, tanto por pertenecer a la escasa obra de la especialidad traducida del alemán a nuestro idioma como por el hecho demostrar la faceta médico forense de un autor con fama internacional dentro de la psiquiatría, con atribución de la paternidad de la psicopatología sesexual a partir de las ideas de la función sexual como exclusivamente procreadora y, consecuentemente, del carácter de desviación de deseos de otras actividades del sexo, tales como magistralmente las describió después de leer las obras del Marqués de Sade y de Sacher Masoch.
El texto que tenemos presente corresponde a la tercera edición de la obra original y está formado por dos volúmenes, con un total de 872 páginas. En realidad, sin contenido de esquemas ni de tablas, por estar exclusivamente dedicado a las enfermedades mentales, no es un tratado de medicinal legal sino de psiquiatría forense, probablemente el primero publicado en forma de unidad didáctica, al cual el autor dio el nombre de «Medicina legal de los alienados». La fecha de edición no figura en ningún lugar de los dos tomos, pero se deduce, por la aparición de una cita bibliográfica datada en 1891, que puede situarse a finales del siglo XIX, en los últimos años de vida del autor, que falleció en 1902. Al estar intonso el ejemplar conseguido, a su antigüedad se añade el atractivo de haber podido, al desbarbar sus páginas, leer por primera vez en pleno siglo XXl o que fue editado hace más de cien años, con el sorprendente resultado de no encontrar ningún apartado referente a los conceptos de sadismo y masoquismo, ambos convertidos en imperecederos por el autor, mientras que figuran ampliamente tratados otros con diagnósticos hoy en desuso, como la paranoia sexual y la locura periódica sexual de fondo neurasténico, lo cual encuentra explicación al suponer los descritos con detalle en la anterior amplia obra sexológica publicada por el psiquiatra austríaco.
El tratado es eminentemente clínico, con un asombroso rigor en el manejo del interrogatorio y en la descripción concreta de cada uno de los casos expuestos con precisión, sin ninguna concesión al fácil recurso a la amenidad e incluso a la truculencia de los ejemplos que a veces figuran en los libros franceses de medicina legal de la época. Su contenido está distribuido de manera ordenada en 37 capítulos, cada uno de ellos precedido (no seguido, como es habitual) de una completísima bibliografía. Entre ellos destacan los dedicados a las formas de la locura (especialmente la melancolía, la manía, los delirios, la paranoia, la debilidad mental, las demencias, la epilepsia, la histeria, la neurastenia y la psicosis traumática) y los que se refieren a temas más generales (como los que tratan de imputabilidad, simulación, criminalidad infantil, impulsos, capacidad civil y litigios matrimoniales y testamentarios).
La terminación de la lectura de esta obra de psiquiatría forense lleva a considerar lo mucho que todavía sigue vigente al lado de lo obsoleto, y todo ello adornado con concepciones tan originales como dedicar un amplio apartado a lo que el autor llama «paranoia política» o «delirio reformador».