Conforme a su título, este libro más que un tratado de medicina legal psiquiátrica, como los ya muchos existentes, es un Manual Práctico de Psiquiatría Forense, lo que hace que los temas sean vistos desde el punto de vista del médico forense como parte de su diario ejercicio, a lo que contribuye una edición moderna estructurada para su fácil manejo gracias al índice que precede a cada parte, cada sección y cada capítulo, a los distintos tipos y coloración de letra y de paginación, a la exhaustividad y detalle en cada descripción y al rigor en su tratamiento, a la concreción en las definiciones y en los conceptos y a las diferentes entradas para la rápida localización de cada tema a consultar consulta. Es un libro escrito para los médicos forenses a lo que debe añadirse que su texto debe considerarse un imprescindible medio de consulta a disposición de las últimamente creadas Clínicas Médico Forenses.

Un especial atractivo de esta obra reside en su autoría, debido a que MJ. Checa, Jefe de Servicio de la Clínica Médico Forense de Almería, ha conseguido reunir bajo su dirección a treinta y tres profesionales de los cuales treinta de ellos ejercen en Andalucía en los Institutos de Medicina Legal, Cátedras de Medicina Legal, Instituto Andaluz de la Mujer, Unidad Integral de la Violencia de Género, Juzgados, Fiscalías y Audiencias Provinciales.

El texto está dividido en cuatro partes, y cada una de ellas en secciones. La primera parte consta de una sola sección enunciada como Introducción, la segunda y más importante también con una sola sección dedicada a la Prueba Pericial Médica, la tercera, titulada como Psiquiatría Forense, con secciones referentes a psiquiatría, psicopatología, imputabilidad, violencia de género, capacidad de obrar, peligrosidad criminal y valoración del daño psíquico, y la cuarta y última con una sola sección exponiendo los trastornos mentales desde la perspectiva médico forense.

En todas ellas destacan, por el singular tratamiento con que son desarrollados, algunos temas como las diferencias de la prueba pericial médica entre las jurisdicciones penal, civil y contencioso-administrativa, las diferencias entre el informe médico forense y el informe médico pericial privado, la consideración del médico como perito, como testigo o como testigo-perito, la distinción entre psiquiatras clínicos y psiquiatras forenses, la evaluación psicopatológica y psicométrica, el concepto de atenuante analógico, los modelos de protocolo en la exploración e informe sobre imputabilidad, las consideraciones y protocolos médico forenses sobre la violencia de género y los conceptos de peligrosidad criminal, potencial y civil y el protocolo que en esta obra se propone para la valoración del daño psíquico.

El texto se completa con una amplia bibliografía y un acceso a contenidos adicionales al sitio mediante un código PIN exclusivo para cada ejemplar.

Dragy

El hecho de que la medicina no es una ciencia exacta, pero sí que es una ciencia que cada vez tiene mayor precisión, lleva al recuerdo de la idea de William Thomas, más conocido como Lord Kelwin de que la ciencia empieza a serlo cuando en ella se habla de números. Entendiendo que esta precisión debe ser primordialmente exigible a aquellos médicos que tienen entre sus cometidos el de peritar en sedes penales, civiles y contencioso-administrativas, es por lo que se incluyó en esta sección de la revista Cuadernos de Medicina Forense el correspondiente comentario al libro Essential Evidence-Based Medicine del Profesor Dan Mayer del Albany Medical College de New York basado en cálculos matemáticos y en cuyo prólogo decía que no llegaba a comprender la «alergia a las matemáticas» de muchos médicos ya que la «Medicina son Matemáticas».

El libro al que corresponden estos comentarios va más allá, al estar subtitulado como Métodos de Simulación por Ordenador y tratar por sistemas informáticos el error de pruebas de diagnóstico clínico, ya de por sí con contenido matemático. La obra está escrita por Francisco L. Redondo a quien hace más de tres décadas empezamos a admirar por la amplitud y variedad de sus conocimientos. El libro contiene un texto digno de adentrarse en su estudio, que el autor hace atractivo añadiendo datos culturales que interrumpen de vez en cuando la aridez de la exposición, recurriendo para ello en ocasiones a su propia experiencia y en otras a la literatura y a la historia de la medicina.

El texto, acompañado de unos muy ilustrativos prólogo y advertencias, epílogo, bibliografía, programas de ordenador y de un imprescindible índice analítico, comprende once capítulos sucesivamente titulados como el error en los resultados numéricos, del sentido del número al ordenador, el error en la medida, tipos de distribución y simulación por ordenador, generación de distribuciones normales, propagación del error y series de Taylor, operaciones con variables y predicción de error, medidas globales de inexactitud e imprecisión, heteroscedastidad y perfiles de imprecisión, calibración y transmisión del error e imprecisión y ratios de probabilidad.

El solo enunciado de los capítulos sirve para mostrar como el manejo de esta obra puede servir para ampliar el horizonte de los informes periciales a que dan lugar las querellas, denuncias y demandas sobre responsabilidad profesional médica.

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